The Interview - Fran Contador, Secretario del Patronato de la Fundación Alberto Contador

Gracias a Fran Contador y a Henar García, Directora General de la Fundación Alberto Contador, por su generosidad en compartir con todos nosotros su visión y las iniciativas que están desarrollando.

Fran, aparte de ser el secretario del patronato de la Fundación Alberto Contador, uno de los grandes ciclistas de la historia, también diriges Aurum, Aurum Experiences y el equipo de ciclista Polti – Visit Malta. Como tal, tienes una visión privilegiada del ecosistema y la evolución del sector del deporte en España y, en especial, del ciclismo en todas sus dimensiones. ¿Cuáles han sido las principales evoluciones del deporte en los últimos 5-10 años en general y específicamente en ciclismo?

En los últimos años el deporte en general ha vivido una clara profesionalización, con estructuras más sólidas, un mayor uso de la ciencia y la tecnología, y una transformación en la forma de conectar con los aficionados gracias a la digitalización y a la búsqueda de experiencias más allá de la pura competición.

En el caso del ciclismo, hemos visto una evolución muy marcada: carreras más explosivas, jóvenes talentos que irrumpen antes, un material cada vez más avanzado y, sobre todo, una diversificación del propio ecosistema, que ya no es solo competición, sino también turismo, experiencias, movilidad y estilo de vida. El ciclismo se ha convertido en un deporte más global, más atractivo y con mayor impacto social.

La Fundación Alberto Contador, que formas parte junto a Henar García, Directora General, tiene básicamente dos focos de atención: el ictus y la promoción del ciclismo. ¿Podrías granular en mayor detalle los objetivos de la Fundación y cuáles son los principales públicos objetivo?

La Fundación Alberto Contador trabaja en dos grandes ejes. Por un lado, la lucha contra el ictus, con iniciativas de divulgación, concienciación y apoyo a la investigación, porque es una enfermedad que Alberto sufrió en primera persona y en la que queremos aportar visibilidad y prevención.

Y por otro, la promoción del ciclismo en todas sus vertientes: desde la escuela para niños y niñas, pasando por los equipos de categorías inferiores, hasta el equipo profesional. Queremos acercar la bicicleta como deporte, como herramienta de inclusión y también como estilo de vida saludable y sostenible.

Nuestros públicos son amplios: desde pacientes y familias en el ámbito del ictus, hasta niños, jóvenes y aficionados en el ciclismo, sin olvidar a las instituciones y entidades que comparten con nosotros estos valores.

La Fundación Alberto Contador desarrolla una serie de actividades que se complementan y crean sinergias, desde “Bicis para la vida” a “Idemticos”, Escuela Contador”, “Enbici” y, por supuesto, “Lucha contra el ictus”. ¿Podría explicarnos los principales proyectos que desarrolla la Fundación?

La Fundación desarrolla varios proyectos que se complementan entre sí. “Bicis para la vida” recupera bicicletas en desuso y las entrega a colectivos con menos recursos, fomentando inclusión y sostenibilidad. “Idemticos” es un proyecto de integración a través del ciclismo para personas con discapacidad. La “Escuela Contador” forma a niños y niñas en valores y hábitos saludables a través de la bicicleta. “EnBici” promueve la movilidad sostenible en centros escolares y empresas.

Y, por supuesto, está nuestra labor en la lucha contra el ictus, con campañas de prevención, sensibilización e investigación. En este ámbito, el mes pasado se incorporó como patrono Jaime Masjuan, doctor especializado en el tratamiento del ictus, y junto a él estamos estudiando la posibilidad de realizar un nuevo estudio en el Hospital Ramón y Cajal para analizar cómo influyen los hábitos de vida en el riesgo de sufrir esta enfermedad.

En conjunto, todos estos proyectos tienen un denominador común: utilizar la bicicleta como herramienta de salud, integración y transformación social.

Uno de los aspectos que más ha evolucionado en los últimos años en el deporte es el patrocinio (…) ¿En qué medida consideras que las experiencias “únicas” están en auge, y cómo se articula esta tendencia en el proyecto de SCIO Procycling?

El patrocinio deportivo ha cambiado profundamente en los últimos años. Hoy ya no se centra únicamente en la visibilidad de marca, sino en construir alianzas estratégicas, con visión a largo plazo, objetivos compartidos y un fuerte componente de reputación y sostenibilidad. Y en concreto en el ciclismo, la evolución pasa por hacer al patrocinador parte de tu proyecto. Cuando hablamos de “partners” es así en sentido literal: tienen que sentir que tu proyecto también es suyo, y esa es la clave para que la relación sea larga, duradera y lo más fructífera posible para ambas partes.

Por otro lado, las experiencias únicas están en auge no solo en el mundo del ciclismo, sino en prácticamente todos los sectores. Cada vez más, las personas buscan vivencias y emociones por encima de lo material, y eso está marcando una tendencia muy clara en la manera de consumir. En el caso de SCIO Procycling, respondemos a esa demanda ofreciendo experiencias ciclistas exclusivas, con hospitalidad, rutas y un trato cercano, donde además los participantes tienen la oportunidad de compartir la carretera con ciclistas profesionales y leyendas como Alberto Contador, Iván Basso y otros. Es una forma de trasladar la pasión por el ciclismo y de crear recuerdos imborrables que trascienden la competición.

El mismo concepto se aplica a Aurum Experience, iniciativa del grupo empresarial de Alberto Contador (igual que Aurum Bikes), que cuenta con una oferta experiencial de un valor único.

Como gran conocedor de la industria del deporte, ¿cuáles son los principales retos, oportunidades y tendencias del sector del deporte, en general, para los próximos 5 años y, en especial, para el ciclismo?

De cara a los próximos cinco años, el deporte en general afronta varios retos y oportunidades. Uno clave es seguir avanzando en la digitalización y en la manera de conectar con nuevas audiencias, especialmente los más jóvenes, que consumen deporte de forma distinta. También está la necesidad de reforzar la sostenibilidad, tanto social como medioambiental, porque la reputación de las organizaciones deportivas dependerá cada vez más de su compromiso real en este ámbito. Y, por supuesto, la profesionalización de las estructuras seguirá siendo un desafío para garantizar proyectos sólidos y sostenibles en el tiempo.

En el caso del ciclismo, los retos pasan por mantener el equilibrio entre tradición e innovación. El material, la ciencia y la tecnología seguirán avanzando a gran velocidad, pero el gran desafío será hacer el ciclismo más atractivo para el espectador, más fácil de seguir y con nuevas formas de interacción. Al mismo tiempo, existe una gran oportunidad: la bicicleta está más viva que nunca como símbolo de salud, movilidad sostenible y estilo de vida, lo que abre un abanico enorme de posibilidades para crecer más allá de la pura competición.